viernes, 6 de octubre de 2006

Camisetas

No recuerdo dónde leí que una revolución acaba cuando se empiezan a hacer camisetas con sus consignas. Si el Che levantara la cabeza, probablemente se sorprendería al ver como se ha convertido en LA camiseta del siglo XX, ideal tanto para perroflautas como para clases medias que presumen de conciencia social o chavales que quizás nunca supieron que aquel señor cuya foto lucían en la pechera no era el cantante de Rage Against the Machine.

Todo esto viene porque ayer me sorprendí bastante al pasar a un Pull & Bear y ver en su nueva colección camisetas de grupos tan dispares como los Smiths, Motorhead, Sex Pistols, Ramones, The Who o Led Zeppelín. ¿Democratización o banalización?. Llevar camisetas de grupos siempre ha tenido una fuerte componente de autoafirmación, de diferenciación o conciencia de grupo y búsqueda de miradas cómplices, de decirle al resto del mundo “yo estuve allí” o “cómo molo, que me gusta este grupo”. No sé cómo les sentará a los fans de The Smiths, tan celosos de su pleitesía, que ahora la gente lleve las camisetas de su grupo bandera sólo porque, según Inditex y el EP3, es cool parecer rockero. Gente que ni siquiera sabe quién es Morrissey o nunca ha oído una canción del grupo y que han elegido esa camiseta como podían haber elegido una cualquiera de la colección africana de la temporada pasada. John Lydon dijo que el punk había muerto el día que el primer chaval se puso un imperdible para imitar a sus ídolos, pero poder comprar una camiseta de Sex Pistols, The Clash o Ramones en una tienda de Inditex es realmente mearse en su tumba. Pero bueno, supongo que tampoco hay que tomárselo tan en serio, en el fondo es mucho mejor que la gente lleve camisetas de buenos grupos (¿se interesarán al menos en oírlos?) a otras que ves por la calle y que, cuando menos, producen una cierta aprensión. Y, como es viernes y no me apetece mucho trabajar, me he puesto a pensar en esas camisetas que, queramos o no, nos definen de una forma extraña y me ha salido una lista y todo. Es una opinión personal y estúpida fruto del aburrimiento y sin ningún ánimo de ofender, que conste…


1. Las camisetas divertidas. Si eres un tipo de natural jovial, ligeramente borrachín y/o aficionado al tabaco loco, El Jueves te parece humor fino y quieres comunicarte sin palabras en los bares, ésta es tu camiseta. A nivel formal, las hay de dos tipos: las de mensaje plano (“Demasiado sexo nubla la vista”, “Dónde está mi cerveza”), y las que trasfiguran los logos de alguna marca conocida para darles un doble sentido generalmente drug-friendly (“adidash”, etc.). A nivel de contenido, se centran en tres grandes temas: el alcohol, las drogas (muy en especial la marihuana) y el sexo (con la del ingenioso juego de palabras FBI como siglas de Female Body Inspector a la cabeza). Para partirse la caja.
2. Las camisetas del “top manta”. Nunca he sido muy partidario de llevar marcas: si voy a anunciar un producto, lo lógico sería que me pagaran en vez de tener que gastarme yo una pasta. Pero lo que ya me parece más triste es comprarse el Tomi Jilfiguer o el Lacós en una manta: por si no lo sabéis, se nota. Y eso hay mundos que no lo perdonan.

3. Las camisetas de dibujos animados. También con dos variantes principales: las de los Simpsons, muy cercanas a las del primer apartado, y las de los Looney Tunes, ñoñas hasta el dolor, en especial las de ese horrible pájaro cabezón llamado Piolín, ideales para regalar a adolescentes enamoradas que lubrican almíbar. Para ellos, y casi peores aún, las del demonio de Tasmania o el pato Lucas vistiendo los colores de diferentes equipos de fútbol. Terribles.
4. Las camisetas deportivas. Todavía conservo en la retina la imagen de una chica vestida un sábado por la noche con una camiseta del centenario del Barça con hombreras, bien metida dentro de los vaqueros y con sus taconazos, toda ella elegante a la par que forofa. Si vestirte con los colores de un equipo de fútbol ya me parece raro (son empresas, es como ir con una camiseta de Orange o Vodafone), todavía me parece más horrible la nueva moda de las camisetas de Fernando Alonso. ¿Qué vais a hacer el año que viene con esas camisetas de bonito azul asturiano? Por lo menos a él le han pagado una pasta por vestirse así.
5. La joXQda camiseta de lunares de H&M. ¿Hay alguna mujer en España que no tenga esa camiseta? ;-)

Feliz fin de semana

11 comentarios:

mikto kuai dijo...

:-D))))))) Muy bueno n., me he reído un montón leyendo su post, gracias por su humor ácido.

Lo de los grupos musicales, sobre todo metaleros, en las camisetas última temporada, es lo que tiene la moda, ésta parece que ya no tiene donde sacar tajada y siempre nos sorprende, cual culebrilla zafándose de su enemigo, con nuevas variantes de su producto.

Pensando estoy ahora en la metamorfosis de la palabra moderno, ultrajada debe sentirse, ...moderno: es lo que está según el modo, se entiende el modo nuevo, modificación o moda que en tal presente ha surgido frente a los modos viejos, tradicionales, que se usaron en el pasado. La palabra moderno expresa, pues, la conciencia de una nueva vida, superior a la antigua, y a la vez el imperativo de estar a la altura de los tiempos...

Mal van las cosas, puede pensar uno, cuando lo moderno es un continuo revival -o resurgimiento, con lo rico que es el idioma español- de épocas pasadas; En fin, qué gracioso escuchar a los adolescentes, y no tan adolescentes, modernos llevando sus camisetas de megadeth y diciendo orgullosos que la llevan porque es la moda... y yo con estos pelos, si es que no estoy a la altura de los tiempos, joder.

Rfa. dijo...

El día que yo vi una camiseta de Los Ramones en el escaparate de Pull & Bear me estremeció una incerdidumbre: ¿qué voy a hacer ahora cuando vea a alguien con ella? ¿Pensaré que es un tipo cool o pensaré que es un idiota? Los cabrones de inditex me han inculcado la paranoia, joder. Por si acaso, creo que voy a guardar la mía (comprada en el Marihuana de Cascorro porque AMO A LOS RAMONES) en cualquier rincón de mi armario. Lástima: me quedaba muy bien.

Anónimo dijo...

Genial, n. Fíjate, no recuerdo tener ni haber tenido nunca una camiseta de un grupo, o con una frase y menos de un equipo de lo que sea. De hecho que sepa ahora mismo sólo tengo dos camisetas con las palabras "vanity by vanity" y "save the last dance", y las dos me las regalaron... ¿Qué camisetas lleváis vosotros? Rfa. ya sabemos que no llevará más una de los Ramones.

Anadja dijo...

Me parto.
Sólo dos pequeños apuntes.
1. Camiseta con mensaje jocoso, más habitual entre los entraditos en años y comprada en el rastro del tipo: "Esto no es una calva es un panel solar paara una máquina de sexo" etc etc.
2. "My sister/daughter/son/ etc went to London and all that I got was this lousy t-shirt".
3. Camiseta con la efigie del toro de España (y se me llena la boca de patria).
Muy buena n.
Respecto a tu pregunta Magapola, yo sí tengo una camiseta de lunares de H&M y de grupos sólo he tenido una de The Smashing Pumpkins a los 17 años, por cierto le tenía mucho cariño, donde estará...

Rfa. dijo...

Se me ocurren otras camisetas, n.
1-. Las de Kukuxumuxu (o como quiera que se escriba). Clásico popular para todo tipo de gente, desde ecologistas hasta pijines. Hubo una época en que me parecieron graciosas, pero ahora ya no.
2-. Las de El Niño. Doblemente estúpidas: porque tienen el logo más feo del mundo y porque las lleva todo hijo de vecino. ¿Lo peor? Cuando alguien se las pone pensando que va de surfer molón.
3-. Las de turista culto. Te vas de viaje y te compras una camiseta sobre arte o literatura para que todo el mundo sepa lo listo que eres. Dos grandes clásicos: Kafka en Praga y las manos de Dios y el hombre en la Capilla Sixtina.
4-. Las de Indios míticos, tipo Gerónimo. Son negras y no se pueden llevar por fuera. Creo que nunca las he visto puestas, pero estoy seguro de que alguien las compra porque siempre las venden los jipis.
5-. Las de selecciones de fútbol de países subdesarrollados. Manu Chao debería arder en el infierno por habernos hecho esto. Me pregunto cuánta gente que lleva una camiseta de Senegal vería un partido de esa selección.
6-. Los clásicos olvidados. Hubo un tiempo en que hubiese matado por una camiseta de Hard Rock Café. ¿Y qué decir del inolvidable Smile de los tiempos del acid? Ah, qué tiempos.
7-. Las que te haces tú en la papelería de la esquina. El paradigma de las posibilidades desaprovechadas: puedo hacerme la camiseta que me apetezca y termino con una foto de mi perro o mi bebé.

Anónimo dijo...

Me ha gustado mucho, n! Y las aportaciones complementarias de Rfa y Anadja también (esas camisetas de recuerdo del viaje de tu abuela son muy grandes). Creo que no habeis olvidado una sola categoría camisetera.
Bueno, quizá una, floreciente en este último lustro: la camiseta nostálgico-popular, con imágenes de Espinete, Nono de Ulises 31 o el logo de Mirinda. Yo, que también soy influenciable, caí rendida ante la del chupachups Kojak, así que a veces voy "rellena de chicle".
Respecto a la iniciativa de Pull and Bear, me da mucha pena, porque me pasa como a Rfa...qué hay de las miradas y/o sonrisas cómplices cuando te cruzabas con alguien que entendía perfectamente una camiseta que pusiera, por decir algo, "bela lugosi is dead"? Ahora qué? Y cuando les dé por sacar camisetas con trozos de poemas o novelas que nadie leerá nunca?
Bueno, ahora que lo pienso, ya pocos asociarían "el gran hermano te vigila" con Orwell, pero en seguida te nombrarían a Mercedes Milá...
Democratización? No creo, queda sólo en la superficie. Banalización? Me da que los tiros van a ir más por ahí...
Y para acabar, no tengo ninguna camiseta de lunares, y es más, no sé cómo son esas que decís de H&M.

n. dijo...

¡Dios, nunca he visto la camiseta del panel solar, es mucho peor que cualquier cosa que pudiera describir! Con respecto a la camiseta del toro, le tengo cierto cariño por el efecto Elephant y porque Jarvis Cocker la llevaba en su concierto del Primavera Sound de 2001. Es como poner una folklórica encima de la tele, tiene cierta coartada kitsch, aunque suene idiota.

Las camisetas de El niño también me parecen horribles, casi tanto como las de Guru, auténticos derroches de personalidad perfectamente combinables con cualquier prenda de táctel. Ideales para cualquier domingo en el Kinépolis.

Y, por último, con respecto a camisetas con citas literarias, ¿no vendían hace unos años unas camisetas en La casa del libro con frases célebres como el "I never drink wine" de Drácula? Ya digo, creo recordarlo pero no sé, el otro día hablaba por ahí de las camisetas de los indios con mensajes tipo El bosque no olvida y nadie lo recordaba, pensaba que eran alucinaciones mías...

Antikhristas dijo...

Gran artículo Nacho!
Echo de menos en tu clasificación los míticos polos, también nos daría mucho juego hablar de los polos de rayas tipo rugby, de los polos con la banderita de España, la vuelta de los míticos Fred Perry...
Totalmente de acuerdo en lo de que nos paguen por hacer publicidad de la marca, esos logos que están ahora tan de moda y son tan repungantes, como ejemplo el bolsito con las iniciales de Carolina Herrera, qué poco gusto!!
Y sí, es una pena que Inditex se haga de oro vendiendo la mítica camiseta de Los Ramones. Ya no saben qué inventar!
PD: yo soy una de las que no tiene esa camiseta de lunares de H&M...

Walter Kung Fu dijo...

Estaba escribiendo una entrada sobre camisetas de grupos musicales cuando de repente me acordé que ya había algo publicado. Así que haré mi tardía contribución a esta divertida entrada de n., tirando de revival.

A pesar de que hace mucho tiempo que nos las visto, las camisetas que más me han gustado son las de artistas musicales, especialmente de grupos. La primera que tuve creo que era de los Led Zeppelin y acabo vendida o regalada; la menos duradera una muy guay de los Pixies que intercambié por otra de la misma banda con un tarao en la puerta de un bar; la camiseta comodín, una roja y dos tallas más grande de Yo la tengo que me trajeron de NYC; la que más me gustaba llevar era una de la Velvet Underground, a pesar de que era desteñida con lejía sobre negro; la más macarra, una negra de Jane´s Addiction que me compré en Marihuana; y la deseada, la que siempre quise llevar, una de Los Ramones, pero desde que las ví en Pull&Bear, como decía n., se me quitaron definitivamente las ganas.

Ahora no tengo ninguna. Acabo de revisar el cajón de mis camisetas y confirmo la inexistencia de camisetas musicales, si acaso una de Zara que pone I love rock y otra rosa con un vinilo negro donde pone Soy un vinilo en chino (al menos eso me dijeron).

Rfa. dijo...

La camiseta de un grupo que más feliz me ha hecho jamás fue una de Depeche Mode de la gira de 1988 (falsa, por supuesto), como las que salían en la portada del 101. He tenido miles de camisetas de este grupo, pero ninguna como ésa.
También tuve una camiseta del One de U2 que molaba mucho porque no era la típica. Me habría encantado encontrar una imagen, pero era tan, tan rara, que no ha quedado ni rastro de ella sobre la Tierra.
Otro grupo del que he tenido camisetas ha sido The Cure. Mi favorita todavía la conservo, pero tampoco he podido encontrar una imagen. Lo bueno es que tratándose de Robert Smith, todas las fotos son iguales. Era más o menos así, y me encantaba porque la compré en USA y era de la talla XXL. A los fans de los Cure nos gustaba ponernos camisetas y jerseys de lana grandotes, como los que se ponía nuestro ídolo.
Creo que luego he tenido más camisetas de grupos, rollo Tindersticks, Belle & Sebastian, Wilco y cosas así. Pero ninguna me tocó tan hondo como aquellas de la adolescencia. Ahora apenas exhibo mis gustos musicales.

Anónimo dijo...

Me pregunto cuánta gente que lleva una camiseta de Senegal vería un partido de esa selección.


¬¬ tengo una y si kieres te digo la alineacion del Senegal-Francia del mundial.....y los goles ke marco Diouf y Fadiga en ese mundial.....

Hay ke ser mas respetuoso ^^