sábado, 3 de marzo de 2007

Blankets

Otra maravillosa novela gráfica que nos presenta la editorial Astiberri. En este caso se trata de una historia de infancia, adolescencia y comienzo de la madurez de una chaval que, en la Norteamérica profunda, se decide a pensar por sí mismo. En cada trazo de los magníficos dibujos se condensa la ternura con la que se cuentan historias de crueldad, frustración, contradicción, rechazo, culpabilidad y amor. La religión como criterio opresivo de moralidad de los actos de la vida, y la familia y la sociedad como lugar de génesis, forman también una constante en toda la novela.

Para que os hagáis una idea he extraído un diálogo entre el chico protagonista cuando es niño con sus padres:

MADRE: Espera en nuestro dormitorio, ahora vuelvo con tu padre.
(Cuando entran, se sientan en la cama a ambos lados del chico).
MADRE: El conductor del autobús nos ha llamado hoy. Ha dicho que estabas dibujando en el autobús y que tiraste algo a la basura. ¿Recuerdas qué era?
CHICO: Hum... ¿Dibujos de guerra?
PADRE: No... Por el otro lado.
CHICO: Una señora... sin ropa.
PADRE: Sí. DESNUDA.
MADRE: El cuerpo es algo bello, Craig, pero no así. Dios nos ha creado, pero el pecado nos ha hecho impuros.
CHICO: Lo siento.
PADRES: ¿Cómo crees que nos sentimos con lo que has hecho?
CHICO: ¿ENFADADOS?
MADRE: No. Tristes.
PADRE: *EJEM*
MADRE: Porque Dios te ha dado un talento y no queremos que lo pongas al servicio del Diablo. ¿Cómo crees que se siente Jesús?
CHICO: Sob*Sob*Sob*
MADRE: ¿Eh?
CHICO: sob... tris... ¿TRISTE?


Por supuesto, el lenguaje visual de Blankets es fundamental. De esta manera, nos podemos encontrar distintas escalas entre la cama (gigantesca) y el chico (pequeñín) cuando se encuentra solo en la habitación de sus padres mientras les espera; la madre que se lleva las manos a la cabeza y la gira en señal de vergüenza por lo que ha hecho su hijo; al padre con los dientes y manos apretados mientras pronuncia la palabra DESNUDA; al chico rompiendo a llorar.

No os lo tenéis que perder. Si os ha picado la curiosidad, aquí tenéis otro extracto. Esta vez Craig (el protagonista, no el autor... ¿o ambos?) escucha los comentarios de los parroquianos al respecto de su intención de estudiar de Bellas Artes:

PARROQUIANO: Craig, le aconsejo encarecidamente... le ADVIERTO de manera clara y meridiana que NO vaya a la facultad de Bellas Artes. Mi hermano fue a Bellas Artes, y le hicieron dibujar "a partir de la vida real", ya sabe.
CRAIG: ¿Eh?
PARROQUIANO: ... sin la ropa puesta. Fue como lanzarse directamente a los brazos de la TENTACIÓN. Enseguida, no tuvo suficiente con la gente DESNUDA, así que se hizo adicto a la PORNOGRAFÍA. Y entonces, eso tampoco fue suficiente... lo que le llevó... eh... Lo siento. Lo que le llevó al siguiente paso lógico.
PARROQUIANA 1: ¿M-m-matar a gente?
PARROQUIANO: LA HOMOSEXUALIDAD.
PARROQUIANA 1: Oh... Qué tragedia.
PARROQUIANA 2: Lo mismo sucede en una facultad normal. En una de mis clases de arte, un estudiante hizo una escultura de un torso femenino DENUDO. Y aún no he contado lo PEOR. Lo peor fue que durante la exposición de su trabajo, procedió a toquetear y lamer los PEZONES de las esculturas.
PARROQUIANA 1: *gasp*
PARROQUIANO: TIENEN LA MENTE ENFERMA.
PARROQUIANA 2: Tu única opción Craig, es acudir a una FACULTAD CRISTIANA. Ahí todos tus estudios están centrados alrededor de Cristo. De hecho, rechazan cualquier texto que se salga de la VERDAD de la Biblia.
CRAIG: Ten... tengo mucho que pensar.
PARROQUIANA: Y qué ha sido de tu hermano desde entonces?
PARROQUIANO: Oh, intento mantener las distancias. No he hablado con él en diez años.
PARROQUIANA 2: REZA por tu decisión, ¿vale, Craig?
PARROQUIANO: No quiero DARLE ÁNIMOS, ¿sabes?

Graig Thompson ganó el prestigioso Harvey Award con su primera novela gráfica, Good-bye, Chunky Rice. A él se ha referido Jules Feiffer (ganador del premio Pulitzer) como uno de los jóvenes maestro del cómic, experto en la unión de palabras, dibujos y resonantes silencios.

A Blankets elogios no le faltan, además de haber sido elegido mejor libro del año por el Library Journal, YALSA y Time Magazine, se ha dicho de ella que es "...posiblemente la novela fráfica más importante desde JIMMY CORRIGAN" (Neil Gaiman, autor de Coraline), y una "...rara combinación de sinceridad, lirismo y buen gusto" (Publishers Weekly).

Blankets, una novela gráfica de Craig Thompson, traducción de Raúl Sastre, Astiberri Ediciones, 2004

9 comentarios:

n. dijo...

Hace medio año o así saqué Blankets de una biblioteca y, un mes después, lo devolví sin haberlo terminado. Tiene puntos que me gustaron (de lo que leí, vamos), sobre todo a nivel gráfico, pero cada vez me cansan más los traumas ajenos. Para eso ya están los psicólogos y, para infancias revisitadas, de lo que he leído me quedo con Persépolis o La ascensión del gran mal. En fin, intentaré darle una segunda oportunidad...

Rfa. dijo...

Blankets siempre fue mi asignatura pendiente, Magapola. He estado a punto de comprármelo un montón de veces, pero al final nunca lo hago. En parte, supongo, porque demasiada gente me ha dicho que es un cómic ñoño y autocompasivo. Y en parte también porque mi amigo JA me ha prometido que me lo prestará. El que sí que me encantó fue Cuaderno de viaje, que viene justo después.
Me llama mucho la atención que hayas usado los diálogos del cómic para describirlo. En general suelo prestar mucha más atención a los dibujos, o a la forma en que el texto se combina con ellos. ¿Crees que el estilo de Craig Thompson, a fuerza de ser bonito, termina por no dejar huella y sólo nos fijamos en las palabras? ¿O será que el cómic es demasiado literario?

Anónimo dijo...

Yo considero a Blankets una novela que a nivel gráfico es basante interesante, pero sí, los diálogos por supuesto también me gustan. No los he querido resaltar sin que tengáis en cuenta el trazo, de ahí la página que he insertado.
¿Demasiado literario? Bueno, lo más que puede ser un cómic, y además, no te olvides de que se trata de una "novela gráfica", un término polémico o discutible, pero que describe un tipo de cómic.

Rfa. dijo...

Lo de "novela gráfica" siempre me ha parecido un término absurdo que se inventó algún pedantorro para dar legitimidad literaria a un género que consideraba inferior. Yo, por mi parte, defiendo el concepto "tebeo", que me parece más genérico. Luego, si se quiere, pues se discute sobre lo profunda o trascendete que es cada historieta.

n. dijo...

Rfa., una puntualización pedantorra: hace poco venía en Babelia un reportaje sobre novelas gráficas y creo recordar que decía que el autor del nombrecito fue Will Eisner :).
A mí también me encanta el término "tebeo", aunque lo asocio sobre todo con los clásicos de la Editorial Bruguera. "Comic", por otra parte, no me gusta nada.

Anónimo dijo...

Si ya decía yo que ese términoera polémico. Del artículo que citas, n., me quedo con lo último:

"Una consideración que aumenta el debate del uso del término como un simple eufemismo de tebeo, intentando evitar las preconcepciones peyorativas que tiene el medio. Pero como planteaba el dibujante de From Hell, Eddie Campbell, quizás es el momento de aprovechar la sinergia. En un reciente Manifiesto de la novela gráfica, Campbell reclama que se use el nombre de novela gráfica como un movimiento artístico que tenga como finalidad hacer evolucionar el arte secuencial pese a que, como indica en su primer punto, "el término es inapropiado, aunque se puede seguir utilizando entendiendo que ni gráfica tiene nada que ver con el arte gráfico ni novela con las novelas". Una irónica definición que, en el fondo, parece la más adecuada"

Walter Kung Fu dijo...

Puedo entender que no os guste el término "novela gráfica", pero ¿qué tiene de malo la palabra "cómic"?. Sinceramente, y desde mi ignoracia, no creo que reflejen lo mismo. Me quedo con comic, por genérico y por sonoro.

Rfa. dijo...

Yo me quedo con tebeo porque se puede escribir con tres letras y es muy castizo. Respecto a la cita que transcribes, Magapola, pienso que resulta pretencioso hablar de "manifiestos" o de "movimientos artísticos" cuando se habla de historietas en términos generales. El cómic es un lenguaje y punto. A partir de aquí hay dibujantes para todos los gustos: los que quieren hacer arte, los que quieren hacer reir y los que sólo quieren que te entretengas un rato. Decir que los tebeos son "movimientos artísticos", así, a lo bruto, es como decir que "leer te hace más listo". Hombre, señores, depende de qué, ¿no?
Si alguien quiere leer más, que consulte Mitte. Acabo de publicar un Post sobre 300. El link está en este mismo blog.

Anónimo dijo...

Yo tampoco veo nada de malo a la palabra cómic. También me gusta tebeo, es más español, pero tiene un connotación peyorativa respecto del resto de la literatura. Mortadelo y Filemón un clásico en nuestra literatura, a los que todavía no se les ha reconocido todo su valor.

El caso es que al cómic o tebeo se le ha dado un puesto en las historia de la literatura o del libro de segunda categoría, de lectura "inferior", claro que sin razón, sin ver el contenido, sin pararse a mirar, cosa que se debe hacer y mucho cuando estás ante un tebeo o cómic. La propia palabra "historieta" (por qué no simplemente historia) lo demuestra.

Pero lo que no creo es que se trate de un "lenguaje y punto". Es un lenguaje, evidentemente, pero es mucho más, o al menos no se queda ahí. Todo arte es expresión de un lenguaje.