Ingredientes:Triángulo de Amor Bizarro en el CD, olla express, campana de extracción de humos, pila de platos, vasos y cubiertos, batidora y algunas verduras.
Preparación:1.- Accionar el play de nuestro reproductor del salón. Subir el volumen para que sea escuchado desde la pequeña cocina.
2.- Rescatar el pack de verduras que reposa desde hace días en el fondo del frigorífico.
3.- Pelar y cortar las verduras e introducir en la olla express.
4.- Añadir un par de tazas de agua, un chorrito de aceite y salpimentar.
5.- Tardar unos minutos, otra vez, en cerrar la maldita olla express.
6.- Poner a calentar.
7.- Mientras tanto, optimizamos nuestro tiempo fregando a un metro de la explosiva olla la pila de platos, vasos y cubiertos sucios acumulados en los últimos días.
8.- Una vez comience a pitar, habrá que mantener durante 4/5 minutos la olla en el fuego.
9.- No irritarse cuando la olla cobre vida propia expulsando vapor a nuestro lado. No temáis, difícilmente podría acabar con nuestra vida. Recordad que habéis cerrado correctamente la olla. O no. Da igual. Ya es tarde. En el peor de los casos, quemaduras en el 90% del cuerpo y un buen chichón. Así que seguid fregando y no miréis atrás.
10.- Accionar la molesta campana de extracción de humos y así evitar que la casa huela a repollo durante una semana.
11.- Pasados 5 minutos, abrir la válvula para la despresurización total.
12.- Sinfonía de ruido: la olla expulsando vapor, la campana aspirándolo y el chocar de platos, vasos y cubiertos bajo el grifo abierto. Mantén la calma, este caos sonoro no podrá contigo. Tranquilo. Respira hondo. Acaba de aclarar los platos.
13.- Cuando finalice la despresurización, abrir con cuidado la tapa de la olla.
14.- Por último, accionar la batidora y machacar. Dos consideraciones importantes: no comprobéis con vuestros propios dedos lo afilado de la cuchilla ni os dejéis llevar por la ira o prisa, de otro modo salpicaréis la cocina de sangre o de puré, incluso de ambos los más inexpertos.
15.- Resultado final: una pasta grumosa, densa y de color difícilmente identificable a la que seguro le falta sal.
16.- Salir al balcón, respirar y gritar.
17.- Mañana será otro día.
Por suerte, no tocaba poner la lavadora.