miércoles, 2 de diciembre de 2009

¡Sorpresa!

Llega el día 25 de diciembre por la mañana, los regalos están encima de la mesa. Hay uno en el que pone tu nombre. Es alargado y no muy gordo. Piensas que puede ser un pack de películas de director favorito (mierda, ya las tienes todas), o un libro (la crisis), o un mini ordenador portátil (no, no se tiran tanto el rollo en tu familia), o… esto.


Y una vez que lo tienes en tus manos, ¿lo vas a usar?

8 comentarios:

Rfa. dijo...

Así, a bote pronto, se me ocurren dos pegas:
UNO: Mi estrategia para engancharme a los libros es pintarrajearlos. Si no puedo usar un lápiz mientras leo, acabo perdiendo el interés. Y parece que este aparato del demonio no contempla la posibilidad de que el lector deje su marca, ¿no?
DOS: Creo que he entrado en ese momento de la vida en que ya dispongo de toda la tecnología que necesito para ser feliz. A partir de aquí, toda mejora o avance tecnológico del mundo me van a parecer superfluos y me van a hacer sentir cada vez más viejo.

Walter Kung Fu dijo...

Mis dos apuntes:

Muerte a Papa Noel.

Me temo mucho que lo del libro electrónico será inevitable.

mikto kuai dijo...

Joer qué suerte. Yo quiero uno pero hace poco me informé de los precios de los diferentes modelos y marcas y se me quitaron las ganas echando leches.

No me hagas mucho caso Rfa. pero creo que algunos modelos sí disponen de la opción de subrayar o marcar partes (que alguien nos saque de dudas porque no sé si me lo estoy inventando).

Unknown dijo...

con que decoraremos las estanterías en el futuro?

Walter Kung Fu dijo...

Yo creo que los libros en papel convivirán con los electrónicos, así que no se perderá su función ornamental.

Ox dijo...

Yo tengo uno porque nos lo han prestado para este curso en la universidad. Es un modelo muy chulo porque la pantalla es muy grande y en escala de grises y no hace daño a la vista. Es fantástico para tomar apuntes en los libros y subrayar y cosas así, porque tiene un stylus y una herramienta de escritura, pero llevo con él una semana y lo he tocado dos veces y solamente para fardar.

No huele a libro... y no suena como uno

Un beso! =)

Solterón Amargado dijo...

¡Donde se ponga un buen libro que se quiten estos inventos!

Aunque mi opinión puede cambiar si alguien me confirma si puedo descargarme libros gratis de internet para este cacharrito, claro.

Anónimo dijo...

Bueno, quiero aclarar, mikto, que yo no tengo uno de esos, lo que quería dar a entender es que seguro que a alguien le cae, ¿no? Esas son las previsiones, como dice Walter. Otra cuestión es, ¿se lo regalarías tú a alguien?

Rafa., por lo que nos cuenta Ox parece que tu pega uno ha quedado solucionada, la otra ya es más personal...

Y la pregunta de la abuela me hace pensar. Yo creo que iremos a las tiendas de anticuario a compara libros de decoración, ¿de qué llenas si no una Billy entera? Te sobra la mitad. Aunque eso significaría que puede que sea el fin de las enstanterías como las conocemos ahora...

Pepito Samper, ¿qué no te puedes descargar hoy día gratis por Internet? Si hasta la gente se descarga amor y consuelo...